Perturbación Maquiavélica de Enrique Peña Nieto
Tachan al gobernador del PRI de Nefasto, represor, traidor y mentiroso
Por: Tumbaburros
Ante la desvergonzada y cínica traición del gobernador priísta del Estado de México, Enrique Peña Nieto (a) El Guasón del tricolor, emite constante el mensaje al través de su mediocre discurso político de “implementar una metodología dictadora, para someter las inconformidades de la ciudadanía por medio del garrote, tolete y pistola, a fin de fincar su poder en el derecho a la fuerza y no en la fuerza del derecho”.
Las inconformidades de diversas ideologías partidistas sostienen “queda claro la cerrazón y el autoritarismo con que se maneja el gobernador priísta, Peña Nieto, tras utilizar como método para afrentar la nueva situación política en la entidad, forma parte de la estrategia de la violencia sangrienta, pretende hacerse la víctima y administrar unipersonalmente el Estado, como si fuera de su propiedad”.
Ante los hechos violentos gubernamentales “podemos comprobar la falta de táctica política del bisoño gobernador, Peña Nieto, al reprimir brutalmente a los campesinos indefensos de San Mateo Atenco, tal y como lo señala la Comisión Nacional de los Derechos Humanos; pretender despojarlos de sus fuentes de trabajo a los prestadores del servicio público, de manera ilegal y autoritaria entubar los pozos de agua potable que surten a miles de nativos de Chimalhuacán para beneficiar a empresas trasnacionales y conjuntos habitacionales donde él es socio y, los más criminal, utilizar grupos de choque en gobierno locales del PRD (Texcoco, Valle de Chalco, Ecatepec y Los Reyes La Paz, con el objetivo de desprestigiar su imagen, trabajo y atención a favor de la población que menos tienen, para tratar de desprestigiarlos hasta hacerlos culpables de los problemas urbanos que padecen”.
El defraudador de las expectativas ciudadanas, Peña Nieto mantiene una mentalidad frívola que caracteriza a su desempeño de la buro-política que le da poder ilimitado en el Estado de México. Además, su actitud enfermiza de poder determinar de manera arbitraria las vergüenzas cotidianas del atropello de la justicia hasta autodefinirse como un verdadero verdugo de la Santa Inquisición para reprimir de manera brutal a sus gobernados.
Los constantes hechos sangrientos que se dan en la entidad mexiquense; Texcoco con la represión a campesinos, Chimalhuacán con el cobarde y artero asesinato de dos periodistas a órdenes del síndico procurador del PRI, Raymundo Olivares (a) El Bastardo de la Loba, los 16 muertos en la Marquesa y la emboscada del alcalde del PRI, es una expresión de la mentalidad terrorífica, diabólica, represiva y asesina de Enrique Peña Nieto, hasta someter a un pueblo indefenso que reclama espacios para vivir en paz y poder trabajar de manera honesta.
Las manifestaciones de repudio contra el “Engendro de Hitler”, Enrique Peña Nieto, son múltiples de organizaciones civiles, campesinas, amas de casa, jóvenes, estudiantes y un gran sector de la sociedad, quienes por separado aseguraron “el objetivo de la plutocracia del PRI es conservar el monopolio en el Estado de México a cualquier precio, así sea sangriento”.
Así mismo, las mentiras que día a día da a conocer a la opinión pública de que todo está bien en el Estado de México, es una muestra del nerviosismo de la corrupción gubernamental que deteriora la estructura del gobierno, demuestra su desvergonzada y cínica traición con la población y la gente que lo llevó al poder, lo cual califica su desprecio que tiene con la gente pobre que no encuentra espacios y apoyo para salir del bache económico en el que se encuentra.
Con la desesperación mostrada por el ejecutivo del PRI mexiquense, Peña Nieto fomenta la violencia salvaje con grupos armados – entre ellos Antorcha Popular -, para demostrar a la opinión pública las intenciones maquiavélicas de conservar el poder, al precios que sea, y dejar al descubierto su verdadero rostro de engendro del mal priísta en el Estado de México.
Tachan al gobernador del PRI de Nefasto, represor, traidor y mentiroso
Por: Tumbaburros
Ante la desvergonzada y cínica traición del gobernador priísta del Estado de México, Enrique Peña Nieto (a) El Guasón del tricolor, emite constante el mensaje al través de su mediocre discurso político de “implementar una metodología dictadora, para someter las inconformidades de la ciudadanía por medio del garrote, tolete y pistola, a fin de fincar su poder en el derecho a la fuerza y no en la fuerza del derecho”.
Las inconformidades de diversas ideologías partidistas sostienen “queda claro la cerrazón y el autoritarismo con que se maneja el gobernador priísta, Peña Nieto, tras utilizar como método para afrentar la nueva situación política en la entidad, forma parte de la estrategia de la violencia sangrienta, pretende hacerse la víctima y administrar unipersonalmente el Estado, como si fuera de su propiedad”.
Ante los hechos violentos gubernamentales “podemos comprobar la falta de táctica política del bisoño gobernador, Peña Nieto, al reprimir brutalmente a los campesinos indefensos de San Mateo Atenco, tal y como lo señala la Comisión Nacional de los Derechos Humanos; pretender despojarlos de sus fuentes de trabajo a los prestadores del servicio público, de manera ilegal y autoritaria entubar los pozos de agua potable que surten a miles de nativos de Chimalhuacán para beneficiar a empresas trasnacionales y conjuntos habitacionales donde él es socio y, los más criminal, utilizar grupos de choque en gobierno locales del PRD (Texcoco, Valle de Chalco, Ecatepec y Los Reyes La Paz, con el objetivo de desprestigiar su imagen, trabajo y atención a favor de la población que menos tienen, para tratar de desprestigiarlos hasta hacerlos culpables de los problemas urbanos que padecen”.
El defraudador de las expectativas ciudadanas, Peña Nieto mantiene una mentalidad frívola que caracteriza a su desempeño de la buro-política que le da poder ilimitado en el Estado de México. Además, su actitud enfermiza de poder determinar de manera arbitraria las vergüenzas cotidianas del atropello de la justicia hasta autodefinirse como un verdadero verdugo de la Santa Inquisición para reprimir de manera brutal a sus gobernados.
Los constantes hechos sangrientos que se dan en la entidad mexiquense; Texcoco con la represión a campesinos, Chimalhuacán con el cobarde y artero asesinato de dos periodistas a órdenes del síndico procurador del PRI, Raymundo Olivares (a) El Bastardo de la Loba, los 16 muertos en la Marquesa y la emboscada del alcalde del PRI, es una expresión de la mentalidad terrorífica, diabólica, represiva y asesina de Enrique Peña Nieto, hasta someter a un pueblo indefenso que reclama espacios para vivir en paz y poder trabajar de manera honesta.
Las manifestaciones de repudio contra el “Engendro de Hitler”, Enrique Peña Nieto, son múltiples de organizaciones civiles, campesinas, amas de casa, jóvenes, estudiantes y un gran sector de la sociedad, quienes por separado aseguraron “el objetivo de la plutocracia del PRI es conservar el monopolio en el Estado de México a cualquier precio, así sea sangriento”.
Así mismo, las mentiras que día a día da a conocer a la opinión pública de que todo está bien en el Estado de México, es una muestra del nerviosismo de la corrupción gubernamental que deteriora la estructura del gobierno, demuestra su desvergonzada y cínica traición con la población y la gente que lo llevó al poder, lo cual califica su desprecio que tiene con la gente pobre que no encuentra espacios y apoyo para salir del bache económico en el que se encuentra.
Con la desesperación mostrada por el ejecutivo del PRI mexiquense, Peña Nieto fomenta la violencia salvaje con grupos armados – entre ellos Antorcha Popular -, para demostrar a la opinión pública las intenciones maquiavélicas de conservar el poder, al precios que sea, y dejar al descubierto su verdadero rostro de engendro del mal priísta en el Estado de México.
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